La etapa más larga en la historia del Tour

Hace más de un siglo se disputó una etapa solo apta para héroes: ¡482 km con aquellas carreteras de después de la Primera Guerra Mundial!

Etapa 6 del Tour 2025, de Bayeux a Vire Normandie (Foto: A.S.O. / Charly López)
Etapa 6 del Tour 2025, de Bayeux a Vire Normandie (Foto: A.S.O. / Charly López)

La etapa de ayer del Tour de Francia, de Bayeux a Vire Normandie, supuso la friolera de más de 200 km y cinco puertos de tercera categoría para romper las piernas de los integrantes del pelotón. ¿Os parece excesiva? ¿Ayuda al espectáculo tan larga distancia? Pues eso no es nada. Los Pogacar, Vingegaard y compañía pueden respirar aliviados de que los actuales directores de la ronda gala no tengan la tentación de emular a sus predecesores en la elección del recorrido, pues allá por 1920, los arquitectos de etapas obsequiaron al pelotón con una jornada de 482 kilómetros que unía Les Sables d’Olonne con Bayona.

Imaginad ahora las condiciones de los ciclistas para afrontar tal desafío sobre dos ruedas. No había cambios automáticos, ni ruedas de carbono, ni asistentes repartiendo sobres de gel hidratante en los avituallamientos. Los corredores solo podían hacer una cosa, calarse la gorra, ajustar los rastrales y pedalear durante veinte horas. Si tenían hambre, pararían en alguna taberna de la carretera. Si pinchaban, ellos mismos arreglarían su caballo de acero de más de 15 kg de peso.

Aquellos que consiguieron cruzar la meta en la épica jornada no tuvieron tiempo para celebrarlo. Al día siguiente aguardaba otra etapa de más de 300 km.

Era un deporte distinto. Más aventura que estrategia. Otro tiempo. Pero el mismo objetivo cada vez que arranca la Grande Boucle: llevar a los ciclistas al límite de sus capacidades.