Cuando se anunció el recorrido, 267 km con casi 5.600 metros de desnivel acumulado, ya estaba claro que el Mundial de Ruanda no lo iban a acabar muchos ciclistas. Y menos aún con Pogacar en el pelotón lo que garantizaba que habría batalla y de muy lejos. El esloveno del UAE lanzó su ataque a 105 kilómetros de la línea de llegada, completando la cabalgada a más de 42 km/h pese a los kilómetros, al desnivel, a la altitud (superior a 1500 metros) y al calor.
Tan sólo 30 ciclistas podrán contar a sus nietos que terminaron el primer Mundial de Africa y el del segundo doble consecutivo Tour-Mundial de Tadej Pogacar. Y no creáis que es el que menos de la historia, de hecho, son el doble de los que finalizaron aquel terribles mundial en los Alpes franceses, el de Sallanches en 1980, que dominó Bernard Hinault, con el vitoriano Juan Fernández en la posición de bronce. La segunda edición con menos finishers fue la de 1995 en Duitama (Colombia), el del "doblete" de la selección española firmado por Abraham Olano y Miguel Indurain.




