El reto era complejo, pues construir una heredera que superara en rendimiento, fiabilidad y diseño a la Dogma 65.1, una de las bicicletas más deseadas del mercado, se antojaba difícil. Por ello, los ingenieros de Pinarello definieron desde el primer momento objetivos claro en los que focalizar su acción.
-Una reducción del peso de la bicicleta se traduce en un menor requerimiento de energía a la hora de afrontar una jornada montañosa además de permitirnos aceleraciones y frenadas más rápidas al reducir la inercia de la bicicleta. Para ello han empleado un nuevo material, la fibra de carbono Torayca T11001K y han optimizado la sección de los tubos.
-Una nueva sección de los tubos y una mejor interacción de los distintos componentes de la bicicleta facilitará una mejora aerodinámica al conjunto de la bicicleta reduciendo el gasto de energía a la hora de vencer la resistencia del aire.
-Para conseguir un aumento de la rigidez, Pinarello continúa con sus característicos cuadros asimétricos e implanta el uso de la fibra de carbono Torayca T11001K que ayuda a evitar la disipación de la energía por flexiones en el cuadro.
-Garantizar la misma manejabilidad de la Dogma 65.1, motivo por el que han mantenido la misma geometría y el mismo tipo de dirección.
El diseño de la F8 se ha realizado usando el software FEM, que permite reproducir, estudiar y verificar virtualmente el comportamiento de la bicicleta. A través de este software se crearon y compararon infinidad de modelos, se optimizaron las formas y la sección de los tubos en relación al rendimiento buscado y sobre todo se redujo el tiempo de diseño pues no es necesario crear un molde para fabricar un prototipo real para testar las mejoras.
Este programa ha permitido optimizar los tubos del cuadro e incrementar su rigidez y reducir su peso, algo a lo que ha contribuido también el empleo de la fibra de carbono Torayca T11001K, material que únicamente utiliza Pinarello y que asegura una gran resistencia y rigidez –reducción de la flexión en 1’34mm- con el mínimo peso lo que ha permitido aligerar el cuadro un 9%.
Pinarello sigue apostando por el diseño asimétrico de sus cuadros con la intención de conseguir un comportamiento simétrico. El fabricante italiano pretende compensar las diferentes fuerzas que se generan al pedalear en el lado derecho e izquierdo -por la presencia de la trasmisión en el lado derecho- mediante la construcción asimétrica del tubo horizontal, el tubo diagonal, la tija, las vainas, los tirantes y la horquilla.
Para analizar la incidencia del aire sobre la F8 y diseñarla lo más eficientemente posible desde el punto de vista aerodinámico han empleado el famoso software CFD. El resultado es una horquilla Onda F8 que permite que el viento de cola y lateral ayuden a propulsar la bici hacía delante, una nueva pipa de dirección diseñada para mejorar el flujo de aire entorno al freno delantero o la tija integrada Air 8 –permite incorporar en su interior la batería de los grupos Di2 electrónicos de Shimano- que ha sido construida con la intención de que se integre aerodinámicamente a la perfección en el conjunto de la bicicleta.
Con la intención de optimizar aún más el beneficio aerodinámico, incluye tres agujeros en el tubo diagonal para colocar el portabidón en el lugar habitual o un poco más abajo, ya que esta posición favorece la reducción de la resistencia aerodinámica.
La bicicleta se pondrá a la venta de forma inmediata tras la realización de este anuncio.
Más información en la página web de Pinarello.