Antonio Jesús Soto: "El triunfo en la Vuelta a Murcia significó un antes y un después en mi carrera"

Soto nos recibe tranquilo y feliz en una cafetería del centro de Murcia. Acaba de completar su entrenamiento y se acerca el inicio de su cuarta temporada en el equipo naranja. Como ciclista se muestra ambicioso, quiere seguir evolucionando y pelear por más y mejores triunfos, pero tiene claro que cuando toca trabajar para otros compañeros hay que dejar en la carretera hasta el último gramo de fuerza. Nos habla de proyectos ajenos al ciclismo, de su hijo Martín y de su futuro hermano Gonzalo, que nacerá en la primera mitad de un 2022 en el que el último ganador de la Vuelta a Murcia aspira a demostrar con regularidad que sus piernas no tienen nada que envidiar a las de los ciclistas que integran el pelotón World Tour. Andrés Cánovas y Antonio Soto charlan durante la conversación que dio origen a esta entrevista. Bajos y altos - Has pasado sin duda de tu peor año deportivo al mejor. ¿Cuál fue la clave? - En 2020 sufrí la fractura de una vértebra y de una costilla, así que sólo pude completar diez días de competición. Me planté con bastantes dudas en el inicio de 2021, incluso llegué a plantearme la retirada, ya que tenía muchas molestias y no podía ni realizar en condiciones los entrenamientos que planificaba mi entrenador. Por suerte me puse en manos de fisios y osteópatas y con ellos conseguí recuperarme al 100%. - ¿Hasta qué punto te han afectado las caídas y las lesiones hasta ahora? - El ciclismo es un deporte en el que las caídas forman parte del día a día. Además, por mis características de meterme en las llegadas, siempre hay mayor probabilidad. Todos los años me he encontrado con algún contratiempo, incluso esta vez también tuve la lesión a días de acudir al Mundial, pero el resto de la temporada pude completarla sin problemas. - Los resultados comenzaron a llegar en la Vuelta a Murcia, donde ganaste frente a tus paisanos en la meta de Alcantarilla. - Fue un poco épico y, la verdad, muy atípico, ya que en Murcia nunca llueve y aquel día tuvimos frío, lluvia y viento. Una jornada de euforia, ganar y estrenar el palmarés profesional arrancando desde lejos, siendo valiente y conseguirlo además frente a mi gente y en mi pueblo. - ¿Cambió algo en tu mentalidad y en tu forma de afrontar las carreras después de estrenar el palmarés? - Ese triunfo en la Vuelta a Murcia significa un antes y un después en mi carrera. Mi preparador me insistía mucho en que tenía las victorias en las piernas, pero siempre te queda la duda de si podrás conseguirlo. Desde aquel éxito voy con más confianza y seguridad al resto competiciones. Un día para recordar. Victoria apoteósica bajo la lluvia en la Vuelta a Murcia que terminaba en su localidad natal, Alcantarilla. Todoterreno, Vuelta y selección - ¿Cómo te definirías después de tres años como profesional? - Me considero un todoterreno. No soy especialista en ningún apartado en concreto, pero cuando me encuentro en un buen estado de forma puedo superar bien la montaña y también soy capaz de meterme en las llegadas masivas, aunque creo que lo segundo es más una cuestión de cabeza y valentía. Intento hacerlo lo mejor posible ante cualquier tipo de terreno. - ¿Podrías por lo tanto adaptarte a competir en pruebas de un día? - Son carreras que me gustan. Además he comprobado que mi rendimiento no baja con el paso de las horas, que tengo buena base y un buen fondo. Por lo tanto, por supuesto que me gustaría probarme alguna vez en clásicas importantes de categoría World Tour. - La Vuelta a España fue tu debut en una carrera de tres semanas, donde mostraste un muy buen nivel de principio a fin. - Si te soy sincero, me lo esperaba un poco. Venía de hacerlo muy bien en la Arctic Race, donde incluso me vi capaz de atacar en la parte final de la etapa reina. Llegué con muchas expectativas a la Vuelta a España y en la primera semana comprobé que me encontraba a un nivel bastante óptimo. Después de Murcia veía factible rodar cerca de los mejores del mundo y, aunque todavía en ese momento me faltaba un punto para disputar la victoria en la parte final, espero seguir evolucionando y poder medirme de tú a tú con ellos. - Esa actuación te abrió las puertas de la Selección Española en el Campeonato de Europa. ¿Lo esperabas? - Hay gente que opinó que aquella convocatoria fue un premio, pero yo creo que es algo que me gané por el nivel que mostré y por cómo lo hice. En el propio Europeo cumplí con lo que se me pidió y probé que merecía aquella plaza. En carrera tuve claro que mi único objetivo pasaba por cumplir con el rol que me pidió el seleccionador: endurecer de salida hasta que me quedaran fuerzas. Tenía que darlo todo hasta donde pudiera y así lo hice. - Tan bien lo hiciste que repetiste llamada para el Mundial de Flandes. - Momparler me dijo que quedó muy satisfecho de mi Europeo y que por esa actitud de dejarlo todo por mis compañeros y no ser egoísta tendría hueco en la selección siempre que demostrara un nivel óptimo. La lástima fue la caída ya en Bélgica que me dejó sin Mundial. Llegamos a un cruce, no sabíamos hacia dónde girar, mis compañeros frenaron de golpe y yo, que iba un poco despistado, no pude evitar el choque. Cuarto capítulo como naranja - Inicias tu cuarta temporada con Euskaltel-Euskadi. ¿Cómo te encuentras en el equipo vasco? - Siempre se dice que Euskaltel es una familia más que un equipo, pero es que realmente yo lo siento así. Me encuentro muy cómodo. Tanto Jorge Azanza como Jesús (Ezkurdia), el mánager, me dan una gran tranquilidad y me gustaría pasar aquí muchos años. También es verdad que quiero seguir creciendo como ciclista y competir al máximo nivel en el World Tour, aunque, por qué no, ojalá sea con ellos. - ¿Qué te han pedido para la nueva temporada? - Todavía tenemos que fijar los objetivos concretos, pero Azanza ya me ha comentado por teléfono que correré Mallorca, Valencia y Murcia [Nota: la entrevista se hizo antes de su debut en la Challenge Mallorca]. No hemos entrado en metas más allá, aunque imagino que me pedirán ofrecer el nivel de la pasada Vuelta a España a lo largo de todo el año. - Toda tu carrera deportiva, desde sub-23, la has desarrollado en equipos del norte, aunque fue con Lizarte donde rompiste de verdad ganando la Copa de España. - Juanjo (Oroz) me dio sobre todo la tranquilidad y la estabilidad emocional que en otros lugares quizá no pude encontrar; en ese sentido se parece mucho a Azanza. No es que sean mejores o peores directores, pero en mi caso particular ambos han sabido dar con la tecla, encontrar la mejor versión del ciclista con tranquilidad y paciencia. Eso es lo que me ha permitido rendir al máximo. - ¿Y tú qué le pides a 2022? - Me quedaría con mantener el nivel que mostré de la Vuelta a Murcia para adelante durante todo el año, no sólo durante unos meses, y de esa forma conseguir una victoria o dos más para el equipo. - ¿Y viajar a Australia al Mundial de Wollongong? - ¡Ojalá! Es lo único que le faltó al año 2021 para ser redondo. Como ya he dicho, Mompa se quedó contento con mi trabajo y me transmitió que si continuaba compitiendo a ese nivel seguiría contando conmigo. Cargado de razones Firmó una temporada 2018 para enmarcar Aunque se trate de un problema recurrente, no deja de sorprender lo que costó a Antonio Jesús Soto debutar en profesionales después de un 2018 casi redondo. No es que ganara mucho, es que prácticamente destacó en todas las competiciones clave del calendario élite y sub-23, dominando la general de la Copa de España y aventajando en más de 500 puntos al segundo clasificado en el ranking élite de la RFEC. Además fue plata en el Nacional, completando el duro recorrido en Castellón duodécimo, dentro de un reducido grupo copado por ciclistas World Tour y encabezado por Alejandro Valverde. Por si fuera poco, subió al podio de dos de las mejores vueltas del país como Navarra (2º) y Valencia (3º) y venció en la siempre complicada prueba de Ontur, antes de que esta se incluyera en el calendario de la Copa de España. La Fundación Euskadi le abrió las puertas del campo profesional en su regreso al escalón Continental, convirtiéndose en el único no euskaldun de aquella plantilla junto al 'cedido' Sergio Higuita y el bielorruso Zhyhunou. Su pasado en equipos navarros, primero Telcom y posteriormente Lizarte, validó su pasaporte al conjunto vasco. Tres años después, arranca la temporada 2022 bien posicionado en la formación naranja, como uno de sus más firmes candidatos para saltar al World Tour. Antonio Jesús Soto con los colores del Equipo Lizarte. Foto: Photo Gomez Sport.

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