- ¿Qué te llevó a convertirte en ciclista?
- Mi tío y mi padre habían competido de jóvenes y me apuntaron a una escuela ciclista con 5 años. Le fui cogiendo el gustillo y hasta hoy.
- ¿Cómo fueron esos inicios en las categorías inferiores?
- Tengo muy buen recuerdo de mi época en ellas. Se trataba de disfrutar de un deporte que me gustaba mucho y además hacía muy buenos amigos. Hoy día, viéndolo como una profesión, es diferente.
- ¿En qué momento se comenzó a poner serio tu camino en el ciclismo?
- Es un proceso, pero en júnior te empiezas a plantear si seguirás compitiendo o no, ya que si lo haces tienes que enfocarlo de una forma más seria y dedicarle todo el tiempo que merece. En ese momento toca tomar la decisión.
- Tres palabras que te definan como ciclista.
- Constante, combativa y entregada.
- ¿Cómo es compartir equipo con tu hermana melliza?
- Para mí es un gustazo enorme, hemos cumplido un sueño de la mano. Ambas nos hemos convertido en profesionales recorriendo todo este camino juntas. Es algo que entiendo como un regalo.
- ¿En qué os parecéis más y en qué os diferenciáis?
- Somos un perfil de corredoras bastante parecido en general, pero ella tiene un punto mayor de explosividad. Quizá influya esa ambición suya de no tener miedo a meterse en los sprints o por cualquier hueco, lo que yo miro con un poco más de cabeza.
- ¿Os confunden mucho dentro del pelotón?
- Todavía nos siguen confundiendo, incluso ahora un poquito más. Vamos vestidas totalmente iguales, hasta el punto de que a nosotras mismas también nos cuesta reconocernos en las fotos.
- ¿Qué tal es compartir equipo con ciclistas como Reusser, Lippert o veteranas ya de Movistar como Aude Biannic?
- Son ciclistas que antes sólo veía por televisión y con las que hoy comparto equipo. Las tengo como referentes, son un ejemplo para mí y para otras muchas jóvenes. Nos ven en cierto modo como unas niñas y les podemos recordar a sus inicios y sus primeras carreras, así que te ayudan lo máximo posible para adaptarnos al lugar en el que estamos.
- Este año llegó Cat Ferguson y ahora en verano Paula Ostiz. Un bloque joven cada vez más potente en Movistar Team.
- El desarrollo de las jóvenes cada vez se adelanta más, hay una mayor precocidad en dar el salto y eso creo que es positivo. Que vengan fuerte y apretando por abajo nos ayuda a las demás para sacar nuestra mejor versión.
- ¿Cómo ves la evolución del ciclismo femenino en España?
- Todo se ha profesionalizado mucho y eso es bueno, pero ha provocado que las diferencias entre los WT y los Continentales sean más grandes respecto a los conjuntos de categoría nacional. No hay que descuidar las categorías inferiores, que son la base para el futuro del ciclismo en España.
- ¿Y la generación de juveniles que viene apretando por abajo?
- Tener a una corredora de muy alto nivel como Paula Ostiz hace que si la quieres ganar debas ponerte a su altura o al menos acercarte. Eso hace que el resto de corredoras se exijan más a ellas mismas, que estén demostrando en las carreras internacionales que el nivel va aumentando y que somos una selección a tener en cuenta.
- Un titular que te gustaría leer contigo como protagonista.
- Me marcho pronto al Tour del Porvenir [NR: la entrevista se hizo unos días antes del incio de la ronda francesa, que actualmente se está disputando] , así que me gustaría conseguir allí una victoria de etapa o al menos estar disputando.
- ¿Cuál es tu zona de entrenamiento favorita?
- Me encantan la tierra donde vivo y los puertos que tengo cerca de casa. Diría que las zonas de Asón o de Alisas son las más bonitas.
- Y un puerto que te guste ascender.
- Fuente Las Varas y la subida de Asón, que son las que utilizo para hacer las series. En realidad, cualquier puerto cerca de casa lo disfruto bastante.
- ¿Un plato típico de Colindres que nos recomiendes?
- Lo mejor de la zona es el cocido montañés.
- ¿Quién era tu ídolo o referencia como ciclista cuando eras pequeña?
- Entre los masculinos destacaría a Richard Carapaz, un ciclista que siempre está en la pelea y nunca se rinde. De corredoras ha habido muchas, pero quizá diría Annemiek van Vleuten. Llegué a Movistar el año siguiente de que se marchara, pero coincidimos en el último training camp al que asistió donde estuve como invitada. La pude conocer un poco y fue muy agradable.
- ¿Cómo definirías tus dos primeros años en la máxima categoría?
- Ha sido un cambio importante. Voy dando pasitos y evolucionando. Espero que siga así y pronto empiece a dar sus frutos el trabajo que estoy realizando.
- ¿Cómo te gustaría verte dentro de diez años?
- En ese tiempo pueden cambiar muchas cosas. Si sigo andando en bici me gustaría estar en la disputa de carreras importantes.
- Una carrera que no te gustaría retirarte sin haber participado.
- El Giro, incluso por encima del Tour, porque es una carrera que se puede disfrutar más y que me llama más la atención.
- Tu mejor día encima de la bici.
- No sabría quedarme con uno, ya que muchas veces tu mejor día no se relaciona con un mejor resultado. Recuerdo con ilusión terminar la París-Roubaix y esa sensación de entrar en el velódromo. Es una carrera muy diferente al resto.
- ¿Y el peor?
- Este año en una etapa del Tour de Gran Bretaña en la que tuve muy malas sensaciones desde salida. Fue un día que hizo mucho frío y se me hizo bastante largo incluso llegar a la meta.
- ¿Qué has aprendido del ciclismo?
- Durante estos últimos años, ya en mi etapa como profesional, he entendido los sacrificios que requiere dedicarte 100% a este deporte.
- Además de la bici, ¿qué ocupa tu tiempo?
- Me gusta mucho pasar tiempo en el pueblo con los animales. Me he criado en una familia ganadera y eso me ayuda mucho a desconectar. También aprovecho cuando tengo tiempo libre para realizar rutas a pie por la montaña.
- ¿Eres más de literatura o de ver series y películas en televisión?
- Soy más de televisión que de libros, aunque en realidad prefiero pasar tiempo en la calle y estar al aire libre.