Después de presentar su equipo de embajadores locales y entregar el maillot al Mejor Euskaldun en la Vuelta al País Vasco, KAS inaugura un nuevo formato de entrevistas liderado por Joseba Beloki. A lo largo de la temporada ciclista, el guipuzcoano charlará con algunas de las figuras más destacadas de este deporte, empezando por Paco Galdós, uno de los grandes corredores españoles de los años 70 a su paso por el mítico equipo KAS.
El exciclista habla en esta entrevista de sus inicios como amateur, de lo que sintió al vestir el maillot amarillo, de las carreras conquistadas y de las anécdotas de aquellos años que todavía atesora con cariño.
“Reunir a dos leyendas del ciclismo como Joseba Beloki y Paco Galdós es para nosotros un verdadero placer. Además de conectar con el legado de KAS y afianzar su arraigo al norte, creemos que se trata de una iniciativa que la afición disfrutará enormemente. Nuestra intención siempre ha sido la de acercar el ciclismo de competición a todo el mundo y reavivar la pasión por un deporte que consideramos muy nuestro”, apunta Natalia Suazo, directora de Marketing de Bebidas para el Suroeste de Europa.

Equipo de referencia
Aunque de pequeño le encantaba el fútbol, Paco Galdós (Lasarte, 1947) no tardó en cambiar la pelota por la bicicleta cuando descubrió su afición por el ciclismo. Comenzó su carrera como profesional en 1969 como miembro del equipo KAS, al que perteneció once temporadas (hasta 1979). Después cerró su carrera en 1980, temporada en la que vistió los colores del Kelme.
“Durante aquellos años KAS era el equipo de referencia en España, porque tenía los mejores corredores”, recuerda el exciclista vasco sobre su paso por el conjunto amarillo, con el que logró dos podios en el Giro de Italia (2º en 1975 y 3º en 1972), la Subida a Arrate en 1975, el 2º puesto en la Vuelta a España de 1979 y tres victorias en la Vuelta a Cantabria, entre otras pruebas. En total obtuvo 13 victorias como profesional.
Más de cuatro décadas después, Galdós continúa compartiendo con KAS la pasión por el ciclismo y el arraigo al norte que les unieron. “KAS suena y sabe a ciclismo”, apunta. Y aunque el deporte ha cambiado mucho desde que él compitiera hasta ahora, admite que le encanta verlo y no se pierde ni una carrera.