Carlos Verona: "Omega Pharma quiere que sea un corredor de grandes vueltas"

Entrevistamos a una de las grandes promesas del ciclismo español antes de hacer su debut en la Vuelta a España. Un caso de precocidad único en nuestro ciclismo.

Carlos Faba

Carlos Verona: "Omega Pharma quiere que sea un corredor de grandes vueltas"
Carlos Verona: "Omega Pharma quiere que sea un corredor de grandes vueltas"

Carlos Verona es un caso de precocidad prácticamente único en nuestro ciclismo. Pasó de juveniles a profesionales sin probar si quiera la categoría sub23. El Burgos-BH le dió la oportunidad y no la desaprovechó: dos años después ya estaba corriendo en el Omega Pharma-Quick Step junto a Cavendish, Boonen, Tony Martin o Kwiatkowski. Este próximo sabado, con tan solo 21 años, debutará en una grande, la misma que le contagió su pasión por el ciclismo, la Vuelta a España.

Lo primero, queremos felicitarte por tu participación en la Vuelta y lo segundo, ¿Imagino que debutar en una grande, además en la carrera de casa, debe ser un sueño hecho realidad para ti?

Si, la verdad que la Vuelta es una carrera que me hacía mucha ilusión correr. Me enganche al ciclismo por ella hace ya más de diez años y ha sido una recompensa a todo el trabajo de esta temporada. Espero poder devolver la confianza a mi equipo con un buen rendimiento.

Has estado concentrado tres semanas en Navacerrada preparando la Vuelta, ¿Qué tal te encuentras? ¿Cuáles son tus sensaciones tras los buenos resultados en el Tour de l’Ain?

Cuando acabe el Campeonato de España sabía que había posibilidades de hacer la Vuelta, así que paré, me tome unos días de vacaciones y en seguida comencé la preparación de la segunda parte de la temporada situando la Vuelta como el gran objetivo. He estado tres semanas en Navacerrada pero sin entrenar demasiado ya que quería llegar fresco y aunque me sentí bastante falto de ritmo en la Clásica de San Sebastián, ya en el Tour de l’Ain las sensaciones han sido bastante mejores y parece que toda va según lo previsto.

De cara a la Vuelta, ¿El equipo te ha asignado un rol determinado  o gozaras de algo de libertad para intentar brillar por tu cuenta?

Mi misión es trabajar al 100% para Urán. Rigoberto ha preparado bien la Vuelta y desde el equipo confiamos en él. Estaré a su entera disposición. No me planteo tener mi oportunidad, simplemente quiero estar a su lado siempre que me necesite.

¿Cómo valoraras estos dos años que has pasado en Omega Pharma a nivel deportivo?

A nivel deportivo, muy positivamente. En ocasiones he pasado por momentos difíciles pues he tenido un calendario exigente, especialmente este año que he hecho muchas carreras World Tour, y cuesta ver en forma de resultados los esfuerzos que haces entrenando. Esto me ha servido para convertirme en un corredor mucho más hecho y en carreras como el Tour de l’Ain, donde estuve delante y fui tercero en una etapa, tener unos resultados que demuestran que recompensan en parte el trabajo que he hecho anteriormente.

¿Y a nivel personal?

Desde que llegue no me costó nada integrarme en el equipo. A la mayoría ya los conocía de un par de concentraciones a las que había acudido con el Omega antes de oficializar el fichaje por lo que todo fue más fácil. El trato es muy bueno con todo el mundo aunque a veces cuesta profundizar en las relaciones por el idioma. Lo más destacado es que a pesar de ser un equipo muy grande, el ambiente es muy bueno y me encuentro muy a gusto.

Todavía eres un ciclista muy joven, tienes tan solo 21 años, y aunque ya llevas dos años en un equipo del nivel del Omega Pharma se presupone que aún tienes un gran margen de mejora. ¿Qué balance haces de tu evolución como ciclista hasta ahora? ¿Qué cotas te planteas alcanzar en el futuro?

Yo trabajo día a día para mejor. Sé que aún tengo margen de mejora y el tiempo dirá hasta donde puedo llegar. De momento, mi objetivo es convertirme en un ciclista más completo, más sólido e intentar ofrecer un rendimiento superior en la montaña.

Algunos de los ciclistas más veteranos del pelotón nacional, como Pablo Lastras, destacan el conocimiento de su cuerpo, de sus reacciones, como el beneficio más importante que reciben de su experiencia. ¿Sientes que por tu juventud aún te cuesta gestionar ese tipo de aspectos?

En este campo notó que todavía tengo bastante que mejorar. Solo llevo cuatro años como profesional, soy muy joven y las reacciones de mi cuerpo en ocasiones me sorprenden. Este año he intentado exigirme menos en los entrenamientos para llegar más fresco a la competición pero aun así es difícil prever el rendimiento que tendrás incluso cuando estás trabajando bien.

Da la sensación que hasta ahora en el equipo te han protegido bastante. Has estado siempre en un segundo plano, aprendiendo, trabajando para tus compañeros… ¿Crees que se acerca el momento de empezar a jugar tus opciones y brillar?

Todavía no. Creo que no estoy preparando para liderar un equipo como el Omega Pharma. De momento, quiero seguir trabajando para Kwiatkowski y Urán, pero estando cada vez más cerca de ellos y llegando más lejos en los finales más complicados.

Tenemos entendido que esta temporada finaliza tu contrato, ¿Estás negociando la renovación con Omega? ¿Mantienes contactos con otros equipos?

Estoy negociando con Omega Pharma. Mi intención es continuar en el equipo. Se han portado muy bien conmigo, fueron quienes me dieron la oportunidad de llegar al World Tour y me siento muy a gusto por lo que no hay ningún momento para querer cambiar.

¿Desde el equipo te han marcado que esperan de ti en el futuro? ¿Qué seas un hombre referencia en la montaña?

Su idea es que sea un ciclistas de grandes vueltas con capacidad para destacar en las jornadas de montaña.

¿Sientes que el público tiene muchas expectativas puestas en ti por haber sido un ciclista tan destacado en juveniles y haber llegado a un equipo de la talla del Omega siendo tan joven?

No especialmente. Además, es un tema que no me preocupa mucho. Yo tengo mi historia y la de cada cual es diferente. Por falta de trabajo y ganas no va a ser. De aquí a unos cuantos años, sé que seré el mejor ciclista que mis condiciones me permitan porque todo lo que esté en mi mano, lo intentaré. Aún es pronto para saber qué tipo de corredor seré, si ganaré o no, pero ganas y esfuerzos no van a faltar.

Fuiste uno de esos pocos ciclistas que dan el arriesgado salto de juveniles a profesionales. Hemos visto algunos casos de ciclistas que no han tolerado muy bien el cambio. ¿Crees que acertaste pasando al profesionalismo tan joven? ¿Lo asimilaste bien?

El principal problema que te encuentras cuando pasas desde juveniles es desmotivarte por la falta de resultados ya que por mucho que entrenes, ves que los resultados no llegan. Yo ya superé con éxito esa etapa así que si me preguntas a día de hoy, creo que sí. Me gano la vida de la forma que siempre he soñado, estoy en uno de los mejores equipos del mundo…

Como decíamos, pasaste a profesionales con 18 años, en plena adolescencia , y  para ser ciclista del más alto nivel la cantidad de sacrificios que hay que hacer impide tener una vida acorde a la de una persona de tu edad. ¿Qué tal llevas este tipo de renuncios?

Todos los sacrificios que requiere el ciclismo, los hago con gusto. Lo llevo muy bien, el ciclismo es mi pasión, me aporta muchísima felicidad y sé que no hay otra cosa que pueda aportarme un sentimiento así. Me apoyo mucho en mi familia y en mi novia, un pilar importante para mí, y aunque he tenido que renunciar a muchas cosas, no las echo de menos.  Esta vida no la cambio por nada.

Siguiendo un poco tu trayectoria, pareces muy consciente del retorno positivo que recibe un deportista si maneja bien la comunicación en torno a su figura. Tienes una página web bastante completa, varios vídeos colgados en Youtube que explica como afrontas tus entrenamientos y preparaciones. ¿Tus estudios de Marketing y Administración de mercados te han influido mucho en esto?

Manejar bien este aspecto me parece algo fundamente. Los medios de comunicación, las redes sociales, todas estas posibilidades de interactuar con la gente nos ha reportado mucho beneficio a los deportistas. Somos embajadores de unas determinadas marcas y hay que intentar rendir tanto dentro como fuera de la carretera. Invierten mucho dinero en nosotros y todo retorno que podamos ofrecer es poco.

Una de las historias más curiosas que hemos leído sobre ti es que Chris Froome estuvo hace unos años, cuando corría en el Barloworld, viviendo un tiempo en tu casa. ¿Cómo acabó Froome pasando unos días contigo?

Froome y John Lee Augustyn estaban preparando el Giro de Italia de 2006 por la zona de Navacerrada e hizo un tiempo horrible. Lluvias, frío, nieve. Coincidí un par de días entrenando con ellos y les invite a pasar unos días en mi casa ya que en San Lorenzo del Escorial, donde vivo, al menos se podía salir entrenar y a raíz de esa circunstancia estuvimos conviviendo durante una semana.

¿Te inspiró o te motivo especialmente tener a dos ciclistas profesionales en tu casa cuando tenías tan solo 14 años?

Ver su modo de vida tan de cerca, como vivían, dos chicos africanos que habían dejado todo atrás para hacer realidad el sueño de su vida, me parecía fascinante. Me di cuenta que quería vivir como ellos y a base de trabajar muy duro y estar el día adecuado en el lugar oportuno, he tenido buenas oportunidad que he sabido aprovechar hasta el momento.

Y para terminar, ¿un deseo a cumplir en esta Vuelta a España?

Poder estar al lado de Rigoberto Urán siempre que me necesite e intentar llegar lo más lejos que pueda en cada etapa junto a él. Esperemos que Rigo pueda hacer una buena clasificación general.