198 ciclistas se alinearán este próximo sábado, 2 de julio, junto al Mont-Saint-Michel -una pequeña isla rocosa coronada por una espectacular abadía que se erige como una de las grandes atracciones turísticas del país galo- para tomar parte en el Tour de Francia, la vuelta por etapas más importante del mundo y con la que han soñado desde que son niños cada uno de los participantes de la carrera. Todos se han imaginado reinando de amarillo en los Campos Elíseos de París, pero solo unos pocos cuentan cada año con opciones reales de conseguirlo. Y en este 2016, tres nombres se elevan por encima del resto como grandes candidatos: Chris Froome, Nairo Quintana y Alberto Contador.
CHRIS FROOME
El vigente vencedor de la Grand Boucle vuelve a ser el máximo favorito a revalidar el título. Los dos últimos Tour que ha logrado concluir –en 2014 abandono por caída- lo ha hecho vestido de amarillo y esta temporada no ha ofrecido síntomas que permitan intuir una decadencia en su rendimiento. La falta de resultados que ha experimentado en la fase inicial del curso responde a un planteamiento de temporada mucho más pausado, sin un pico de forma en el mes de marzo-abril, con la intención de llegar más fresco a la última semana de la ronda gala y en plenas condiciones a los Juegos Olímpicos. Y precisamente este cambio en su habitual hoja de ruta es el mejor reflejo del enorme respeto que infunde la figura de Nairo Quintana en él y en todo el equipo Sky.
El pasado año, Froomey tuvo que explorar sus límites para conservar el liderato en los últimos días de competición del Tour debido al empuje del colombiano, e incluso vislumbró en algunos momentos la posibilidad de perderlo. El líder del Movistar Team cumple 26 años y año a año progresa imparable hacía el trono de mejor escalador del mundo a la par que lima sus carencia contra el reloj, por lo que puede que esta variación con respecto a la receta de 2013 y 2015 sea necesaria si el keniata quiere volver a derrotar a Nairo. David Brailsford, para reforzar la posición de su líder, gastó y mucho en el mercado de fichajes para construir uno de los mejores bloques que jamás hayan acudido a una gran vuelta. Landa, Geraint Thomas, Poels, Henao, Mikel Nieve, Vasil Kiryienka, Ian Stannard y Luke Rowe forman un equipo extraordinario, sin fisuras y de máximas garantías independientemente del terreno al que se tengan que enfrentar, por lo que solo la falta de fuerzas o la manifiesta superioridad de alguno de sus rivales puede alejar del triunfo a Froome, pues gregarios de calidad con los que socorrer cualquier jaque que le plantee el recorrido o sus adversarios no le van a faltar.
NAIRO QUINTANA
Quintana solo ha disputado el Tour de Francia en dos ocasiones (2013 y 2015), y en ambas ha sido segundo. Es un corredor nacido para este tipo de carreras, para las grandes vueltas por etapas. En sus piernas, en su genética, se encuentra una capacidad más que sobrada para conquistar la prueba más afamada del mundo y 2016 puede que sea el año en que su sueño amarillo se transforme en realidad. Ya pudo haber ocurrido en la pasada edición; quizá con una estrategia más ofensiva lo hubiera logrado, pero sobre todo si no hubiera perdido ese minuto y veintiocho segundos en la primera etapa en línea, un día infernal, lluvioso y con un viento atroz, que le penalizó de forma decisiva. Y precisamente evitar que se repita una circunstancia de este tipo, ha de ser el gran objetivo del colombiano.
Temporada tras temporada la temida primera semana del Tour de Francia se cobra las opciones de alguno de los favoritos, por lo que llegar a la séptima etapa, en la que ya se encontrarán con el Col d’Aspin, con el mismo tiempo que Froome ha de ser su primera gran misión. A partir de ahí, si quiere ganar está obligado a hacer diferencias en la montaña. Nairo tiene que demostrar que es el mejor escalador del mundo, y terreno para ello tendrá y mucho pues estamos ante una Grand Boucle inusitadamente montañosa en la que al menos necesitará endosar un par de minutos en su terreno al líder del Sky para contrarrestar la superioridad de este en la contrarreloj.
Y si decíamos que Sky se presenta en la línea de salida con un equipo de ensueño, el Movistar Team no le va muy a la zaga. Alejandro Valverde, Ion Izagirre, Dani Moreno, Winner Anacona, Jesús Herrada, Gorka Izagirre, Imanol Erviti y Nelson Oliveira forman un grupo que puede plantar cara y discutir el mando del pelotón al de los ingleses.
ALBERTO CONTADOR
El Pistolero, tras intentar abordar el pasado año el doblete Giro-Tour, ha vuelto a centrar todos sus esfuerzos en realizar una meticulosa preparación para ofrecer su mejor versión en el mes de julio. La Grand Boucle volverá a ser el punto central de su temporada, y a sus 33 años y con siete grandes vueltas en su palmarés, solo contempla una posibilidad: ganar el Tour de Francia siete años después de que entrará en los Campos Elíseos como maillot amarillo por última vez, algo que nadie ha conseguido en la historia tanto tiempo después.
Pocos ciclistas existen tan profesionales y con un conocimiento tan profundo sobre su cuerpo como Alberto Contador, por lo que no cabe duda que estará al 110% en la línea de salida de la ronda gala este próximo sábado, pero la incógnita es si será suficiente para poder desbancar a un Froome en plenitud y frenar a un Quintana en pleno auge. El paso del tiempo no perdona y Alberto ha visto mermada su explosividad. Este año, le hemos visto perder la rueda de sus rivales en varias ocasiones dentro del último kilómetro cuando ha llegado el turno de esprintar para alcanzar la línea de meta, y sus arrancadas han sido algo menos efectivas, una circunstancia que dificulta que salga victorioso en los enfrentamiento de tú a tú en la alta montaña. Sin embargo, su ritmo de ascensión continúa siendo extraordinario, algo que ha ratificado en la cronoescalada del Criterium del Dauphine, donde batió a Froome y Richie Porte, y sigue ofreciendo grandes prestaciones en la lucha contra el reloj, como bien demostró en la Vuelta al País Vasco, donde además de ganar la crono final se hizo con la clasificación general.
Contador cuenta con el importante añadido de que su valentía y su brillante lectura de carrera le permiten plantear movimientos estratégicos que podrían voltear la carrera a su favor y contrarrestar cualquier tipo de pérdida que pueda contraer en la montaña o en la contrarreloj de 37,5 km de la 13º etapa con respecto a Froome, que es sin duda el mejor especialista entre los grandes favoritos.
En lo que respecta al equipo que acompañará al madrileño por las carreteras francesas, cabe destacar a Rafal Majka, escalador de primer nivel mundial, que ha de ser un soporte clave en las jornadas más decisivas para Contador. Kreuziger y Kiserlovski completan el bloque para la montaña del conjunto Tinkoff, que se antoja claramente inferior al de Sky, Movistar o Astana. Para protegerle del viento y en las etapas llanas contará con Matteo Tossatto, Michael Valgren y Maciej Bodnar, mientras que Oscar Gatto será el lanzador de Peter Sagan en las llegadas masivas.