"Se
ha ido a un ritmo muy fuerte todo el día y no había tiempo para coger el ritmo
de lo que es un puerto de montaña, pero estoy contento es otro día menos y cada
vez están más cerca los Pirineos", dijo el líder del Saxo Bank-Sungard.
Para
Alberto esto no fue un duelo con Andy Schleck, porque "sólo era un repecho de
fuerza para gente capaz de subir con el plato, más que para escaladores y por
eso estoy contento. Cuando se ha movido Gilbert yo estaba probando, poco más se podía hacer en una etapa como la de hoy. Lo
mejor es que la he pasado sin caídas". Ha sido un final de etapa "duro. Todo el día hemos ido a ritmo muy rápido para que la escapada no llegara. Los últimos kilómetros eran muy peligrosos por la bajada y había que ir bien colocado".
Contador
considera que quitar tiempo antes de los Pirineos será difícil. "Lo veo muy
complicado, pero nunca se sabe donde es mejor, si en los Pirineos o en los
Alpes. No hay que obsesionarse con recortar diferencias en los Pirineos, porque
los Alpes están en la última semana e igual hacen más diferencias. Hay que ver
cuál es el momento adecuado y aprovecharlo. Se ha visto que la gente va
bastante justa y estas primeras 9 etapas van a tener un papel importantísimo
para la montaña".
Por
último, Alberto dijo que la pérdida de tiempo de Gesink era importante porque
esta etapa "podía pasarle factura a alguien. Siempre que haya corredores del
nivel de Gesink que pierdan tiempo en la general es bueno". Sobre sus heridas, comentó que "Al principio de etapa siempre voy un
poco más justo. El costado derecho me duele un poco".
Contador: "No hay que obsesionarse con recortar diferencias"
"El costado derecho me duele un poco"
