Foto: Tim de Waele
Alberto Contador ha cumplido los objetivos que se marcaba en la Clásica de los Puertos, que no eran otros que chequear su estado de forma de cara a la Vuelta a España. "Ha sido un buen test porque es una carrera exigente y muy loca, tanto en el puerto de los leones como en Navacerrada he podido atacar desde atrás y eso me vale para coger confianza", señaló y añadió que la Clásica también le ha servido para "ver que mis compañeros están en un gran estado de forma para poder ayudarme" durante la Vuelta.
Recalcó también que la prueba fue "más difícil de lo que parecía", puesto que "ha habido muchas escapadas, primero se han ido un grupo de 19 corredores y yo no estaba, pero sí Leipheimer y Chechu Rubiera", pero pudo contactar con la cabeza de carrera, lo que supuso una "paliza muy grande. Estaban controlándome mucho y, primero se ha ido un grupo para adelante en el que no estaba yo y hemos esperado a que se formara otro grupo".
El madrileño quiso destacar el buen trabajo de sus cinco compañeros que corrieron junto a él en la Clásica de los Puertos. "Paulinho y Muravyev han ido muy fuerte en el llano y al pie del puerto me han dejado a tan solo 44 segundos de la cabeza. Luego, con el gran trabajo de Dani Navarro en la subida, solo he tenido que arrancar para poder cogerles". Durante esa subida al puerto de Navacerrada sufrió una caída al chocar con un coche que frenó. "No ha tenido mayores consecuencias", analizaba, mientras observaba la pequeña herida que tenía en la rodilla derecha.
Leipheimer, satisfecho
Una vez alcanzado el grupo de cabeza, "hemos intentado controlar la carrera entre los dos. Primero he atacado yo, he tensado mucho la carrera y después ha arrancado él y se ha ido mientras le hacía de freno". Así, Leipheimer se plantó en meta con 41 segundos de ventaja respecto a Contador. El mismo hombre que le privó d la medalla de bronce en la prueba contrarreloj de los Juegos Olímpicos fue, dos semanas después al que ayudó para conquistar la victoria en la Clásica de los Puertos. "Para mi es un honor que estemos en el equipo corredores como él y Kloden porque hace que tengamos un gran nivel", comentó. "Unas veces gana uno y otras otro, pero que haya ganado hoy él, es como una victoria para mí", zanjó.
Por su parte, Levi Leipheimer se mostró muy feliz por la consecución del triunfo en una carrera a la que tiene especial gusto. "Las subidas son muy bonitas, el paisaje, los árboles, el aire fresco que se respiraba...me gusta mucho esta carrera", declaró. Leipheimer, que fue protagonista de la carrera desde el inicio, con la fuga numerosa, afirmó que "al principio no he encontraba bien pero, conforme pasaban los kilómetros iba mucho mejor". Añadió que "Alberto y yo hemos tenido una gran actuación. Él iba muy fuerte en las subidas. Atacó dos veces para romper el grupo de cabeza y trabajó muy duro para impedir los ataques del resto de los corredores", y lograr así aumentar su diferencia para poder entrar en meta en solitario.