Ayer no se creía que estuviera ahí, mano a mano con los grandes. Miraba a un lado y veía a Tadej Pogacar. Miraba al otro y ahí estaba Jonas Vingegaard. Ni en el mejor de sus sueños imaginaba Victor Lafay (Cofidis), un francés de Lyon, de 27 años, estar en el grupo de los elegidos, los que se pelean la gloria. Y, claro, mucho menos pensaba aún que sucediera lo de hoy. El instinto que le faltó en Bilbao, según sus palabras, lo tuvo en San Sebastián.
🇫🇷 ¡Victor Lafay se lleva la segunda etapa del #TDF2023!
— Teledeporte (@teledeporte) July 2, 2023
🔥 Espectacular final del corredor francés. El equipo Cofidis vuelve a ganar una etapa 18 años después. #TourRTVE2J https://t.co/8rwqOcmJgs pic.twitter.com/DNKEVYJtjF
Lafay, que ya ganó una etapa en el Giro de hace dos años, aguantó de nuevo entre los mejores y cuando ya nadie reparaba en él, en las calles de la bonita y romántica San Sebastián, apareció de la nada para destrozar a todos y deslumbrar al mundo. Ya se puede marchar a casa si quiere. Una etapa del Tour de Francia, la que tantos años llevaba persiguiendo su equipo tras un puñado de ediciones de sequía.
Y de qué manera la consiguió el francés, que se escondió en la cola del grupo, que esperó su momento y que justo antes de pasar bajo la pancarta del último kilómetro, despegó por la izquierda del paquete y empezó un vuelo que ya no aterrizaría hasta meta. Para lamento del resto. Para lamento de Wout Van Aert (Jumbo-Visma), que lanzaba un puñetazo al aire. Al belga le faltaron un par de metros para culminar la remontada de los que esprintaban por detrás.
Antes del vuelo de Lafay y de los lamentos de Van Aert, fueron otros los que intentaron dar la sorpresa. El que más cerca estuvo, Pello Bilbao (Bahrain Victorious), que tan bien conoce el descenso de Jaizkibel que se quedó en solitario en cabeza. Y ya para qué parar. El vasco aguantó unos cuantos kilómetros el sueño de ganar en casa, pero Jumbo-Visma tenía otros planes. Su aventura quedó en nada.
Antes aún, los que se llevaban los focos eran los de siempre. Los dos que aspiran a todo. Aprovechando la bonificación del puerto, Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) saltó a por Simon Yates (Team Jayco AlUla), quien no tuvo compasión de su hermano y pretendía robarle el amarillo a Adam (UAE Team Emirates). Y tras ambos, Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma), que no se despega del esloveno ni un segundo.
Faltaban unos metros para coger el premio cuando Pogacar aceleró y trituró a Simon. Se llevó al danés y juntos hicieron un ademán de continuar la aventura. Quiso Tadej, siempre dispuesto a la locura, pero no Jonas, más tímido en el derroche de fuerzas. Empate y al grupo.
Previamente, el que había pedaleado en cabeza había sido Neilson Powless (EF Education-EasyPost), el estadounidense que lidera la montaña y el más fuerte de la fuga de tres que compartió con Edvald Boasson Hagen (TotalEnergies) y Rémi Cavagna (Soudal Quick-Step) durante toda la segunda etapa, que llevó a los corredores desde Vitoria a San Sebastián por un recorrido de 208,9 km y con un menú de cinco cotas. Unos datos que ya jamás olvidará Victor Lafay, la gran sorpresa del Tour de Francia 2023.
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