Fotos: Tim de Waele
Lance Armstrong ya tiene perfilado su camino hacia el asalto del Tour de Francia y la reconquista de los Campos Elíseos. El heptacampeón norteamericano ha dado a conocer que tomará parte en las grandes clásicas del mes de abril para preparar el tramo de pavé que deberá superar en la tercera etapa ronda gala y se colgará el dorsal en el Tour de Flandes, en la Amstel Gold Race y también en la Lieja-Bastogne-Lieja.
Son pruebas que para Armstrong no son desconocidas, pues ya en 1996 consiguió ser segundo en 'La Doyenne', aunque para al ciclista texano le motiva especialmente el Tour de Flandes, donde podrá medirse sobre el pavés en un terreno similar al que deberá superar en el Tour de Francia. Hasta entonces, en su camino se cruzarán las grandes pruebas de un día del norte de Europa y mucho antes, en apenas dos semanas el Tour Down Under, testigo de su debut en la temporada 2010.