Nairo Quintana dijo ayer jueves que en las dos últimas etapas de la Vuelta al País Vasco, de montaña con final en Eibar y Arrate, el Movistar se jugará la baza Mikel Landa, que es el que "está más cerca" del líder en la clasificación general tras la crono de Lodosa de 19,4 km.
"Estamos a la espera de lo que podamos hacer con Mikel, ayudándole todo el equipo, ya que él está más cerca, e intentarlo en todo lo que queda para obtener el mejor resultado posible", adelantó el corredor colombiano. Al Movistar le "toca ahora esperar que (el líder Primoz) Roglic pueda ceder un poco en la montaña y, al mismo tiempo, intentar nosotros ser un poco más atrevidos", señaló Quintana.
A pesar de haber perdido tiempo con respecto a Roglic y tener cada vez más difícil acabar entre los primeros clasificados, para el de Boyacá el de este jueves en Lodosa "ha sido un buen test y una crono buena, al nivel" que esperaba. "Hemos terminado muy parejos con los rivales que teníamos como referencia para esta CRI y eso nos deja bastante satisfechos. Era una contrarreloj en la que había que saber mantener el mismo nivel y potencia de principio a fin y he podido mantener buenas sensaciones y ser constante hasta el final", dijo.
"Es importante ir ganando confianza y confirmar que seguimos estando a un buen nivel en este tipo de cronos. Está claro que es un aspecto que tenemos que seguir trabajando y mejorando, pero pienso que el resultado está dentro de lo previsto", añadió.
Landa: "Nos tocará atacar"
Mikel Landa (Movistar), quien perdió tiempo y posiciones en la general en la contrarreloj de Lodosa de ayer, asume que a él y a su equipo les "tocará salir al ataque en los dos días que quedan" de la Vuelta al País Vasco, dos etapas de montaña con finales en Eibar y Arrate. "Roglic (Lotto NL-Jumbo), sigue teniendo mucho margen todavía y además ha demostrado ser el más fuerte hasta ahora. Por tanto, nos tocará salir al ataque en los dos días que quedan", asumió el corredor vasco, séptimo en la general a 1:51 del líder de la carrera.
A pesar de que "se habla mucho del sábado" por los ocho puertos con final en el Santuario de Arrate, Landa reparó en que "la etapa del viernes muy dura también". "Aunque no acabe en alto -lo hace en Eibar-, los puertos son muy exigentes y puede pasar de todo", avisó. El alavés, no obstante, sacó "un balance positivo de esta contrarreloj" individual en Lodosa. "Las primeras dos cronos que había hecho este año no habían sido muy buenas y creo que el resultado de hoy ha sido bueno", dijo.
"Estar un poco por delante o muy pocos segundos por detrás de los rivales más directos con los que nos movíamos es una señal de que el trabajo de preparación que hemos hecho es bueno, que los ajustes que hicimos en Tafalla han servido para mejorar y me da confianza sobre mi condición actual y también de cara a cómo afrontaremos las próximas contrarreloj", añadió.