De santuario a santuario. El ecuatoriano Richard Carapaz, ganador hace dos semanas en el Santuario de El Acebo en la Vuelta a Asturias, se impuso en solitario en la octava etapa del Giro de Italia 2018, que llegó al santuario de Montevergine di Mercogliano tras 208 kilómetros desde Praia a Mare. Un gran éxito para el corredor que porta la maglia blanca de mejor joven. El primer ecuatoriano, además, que disputa la corsa rosa y que emerge en el top-diez de la general.
Una etapa larga esta octava jornada del Giro, una etapa de gran belleza paisajística y mucho más poso monumental en la que el protagonismo recayó durante muchísimos kilómetros en una fuga de siete corredores que, deshaciéndose entre ataques, presionada por la cercanía del grupo de los favoritos, se quedó a dos mil metros de triunfar.
???????? First win for Ecuador at the Giro with Richard Carapaz. Ecuador is the 34th winning country in Giro’s history. #Giro101
— Giro d'Italia (@giroditalia) 12 de mayo de 2018
El colombiano Torres (Androni), el neerlandés Bouwman (Lotto-Jumbo), el belga Van der Sande (Lotto-Soudal), los italianos Vilella (Education First) y Montaguti (AG2R) y los eslovenos Mohoric (Bahrein-Merida) y Polanc (Emirates) fueron los corredores que se animaron a la aventura. En cabeza de carrera desde el kilómetro 23, llegarían a disfrutar de poco más de seis minutos de margen sobre un pelotón donde el Mitchelton-Scott marcaba el ritmo. Una fuga con buenos cazaetapas. Y, curiosamente, con un porcentaje altísimo del profesionalismo esloveno.
Su ventaja aguantó en torno a los cinco minutos hasta que a la carrera le quedaban 50 kilómetros. Ahí comenzó su descenso paulatino. En la larga y tendida ascensión final , con el grupo principal a menos de dos minutos, llegarían algunos acelerones entre los fugados. Torres y Van der Sande cederían. Bouwman, uno de los más activos en la ofensiva, lo volvería a probar dentro de unos últimos cinco kilómetros que afrontaría en solitario y con medio minuto de margen. Unos últimos cinco kilómetros en los que se fue al suelo, en plena ascensión, afrontando una curva de herradura, el británico Chris Froome, muy propenso a estos lances y nueva muesca en la extraña andadura, plagada de sucesos, del Team Sky con la corsa rosa.
???????? ???? @RichardCarapazM: "Una salida hermosa, una etapa bonita. Mañana otro día muy largo, muy duro, vamos a ver que va a salir también mañana" #Giro101 pic.twitter.com/oxOABDACqj
— Giro d'Italia (@giroditalia) 12 de mayo de 2018
Pero Bouwman no podría concretar su apuesta porque desde atrás apareció el ecuatoriano Carapaz, antesala de un grupo de ilustres muy nutrido en el que no se registraron diferencias entre los aspirantes a una general en la que sigue al mando Simon Yates. “Venía con buenas piernas desde abajo y quería probarlo desde lejos, porque al sprint no tenía muchas posibilidades, así que he atacado a dos kilómetros”, explicaba Carapaz. “Muy contento y muy emocionado , he hecho un trabajo muy duro y ha tenido una bonita recompensa. No voy más allá. Voy día a día, viendo el Giro. Esto es muy largo hasta llegar a Roma. Lo que podamos encontrar en el camino, bienvenido será”, concluye cuestionado sobre sus opciones.
Este domingo el Giro de Italia afronta otra de sus jornadas relevantes: 225 kilómetros que unirán Pesco Sannita con el Gran Sasso d´Italia. Una novena etapa en la que sus últimos cuarenta kilómetros son, con permiso de algunos descansos, ascendentes.
- Altimetría del Gra Sasso d´Italia
Octava etapa del Giro 2018.
Octava etapa del Giro 2018.
Así va la general.
Así va la general.