Después del duro golpe en el día de ayer con la caída y abandono de Javi Moreno -hombre clave en la montaña de este Giro de Italia para Movistar Team-, la escuadra telefónica supo sacar la fuerza y entereza necesarias para brillar en la 8ª etapa italiana (Foligno – Arezzo, 169 Km). El control por parte de los de Chente y Jaimerena se vislumbró ya en la primera escapada con Rojas -quien demostró en la Vuelta 2015 con varias fugas que se defendía bien en la media montaña- y Sütterlin, apoyo de su compañero de fuga primero y refuerzo de Valverde en los kilómetros finales.
Primer trabajo hecho, llegaba el momento del jefe de filas. Y respondió –y de qué manera– Alejandro Valverde. El murciano lanzó un ataque a poco más de 20km de meta, cambio de ritmo de forma que no pudo soportarlo el líder, Tom Dumoulin (Giant), y puso en aprietos a Mikel Landa (Sky). La labor del conjunto azul fue brillante a partir de entonces, sabiendo dosificar los esfuerzos desde el sterrato del Alpe di Poti hasta meta con Sütterlin, Rojas –dejándose caer de la fuga- y Andrey Amador, fiel escudero del ‘Bala’, que acompañaron en todo momento al de las Lumbreras. Constantes cambios de ritmo durante la subida –con pendientes de hasta el 14%- y también en la bajada, descenso muy técnico con un trazado muy sinuoso que supo aprovechar para marcar diferencias el líder de Movistar Team.
Valverde, sexto en meta, escala a la 4ª plaza de la general, a 36” de Brambilla y a 13” de Zakarin (2º).
DECLARACIONES:
Alejandro Valverde: “Teniendo a dos compañeros en la fuga he pensado en atacar desde abajo del puerto, ir a tope hasta arriba para que luego ellos, Rojillas y Jasha, parasen y nos ayudaran lo máximo posible. Al final así ha sido: han hecho una gran labor y ha sido un trabajo fenomenal del equipo. Los que estaban en el grupo ya se ha visto que estaban muy bien; hemos visto a Fugslang y Dumoulin fallar un poco, pero a este Giro le falta mucho. Más que para dejar al resto, lo que quería atacando era sacar el máximo tiempo posible a Dumoulin, porque para la crono es el más fuerte de todos. Los demás estamos, por ahora, muy parecidos.
Aunque haya tenido un día un poco ‘así-así’, sigo pensando que Dumoulin puede ganar el Giro. No me esperaba haberle sacado lo que le hemos sacado, pero me he encontrado bien y no he dudado ni un segundo. Estoy contento con el resultado. Ayer tuvimos la pérdida de un compañero importante como Javi Moreno, que estaba en gran forma, y hoy lo hemos salvado bien así que estamos contentos. La crono será realmente dura. Es un recorrido que no me desagrada; no es suave y sí técnico y exigente. Esperemos limitar pérdidas y, si se puede, ganar algo de tiempo. Ojalá tenga buenas piernas. No me veo como favorito en absoluto en este Giro; somos muchos hombres muy parejos y la carrera será apretada y difícil”.