El español Alejandro Valverde (Movistar Team) se lamentó este jueves de volver a quedarse con la miel en los labios y "haber rematado otra vez al poste" tras acabar tercero en el Muro de Bretaña, final de la sexta etapa del Tour de Francia. "Ha sido un final complicado y para la colocación, pero es lo que hay. Lo importante es que me encuentro bien y tengo buenas piernas", comentó.
"Seguimos pasando los días y ya he sido cuarto y tercero, pero ganar en el Tour es difícil", aseguró. Sobre el abanico que causó el Quick Step a 100 kilómetros de la línea de meta y tomó desprevenidos a sus compañeros Nairo Quintana y Mikel Landa, explicó. "He estado delante y no me he cortado".
Otros que no pudieron rectificar tras sufrir averías fueron el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) y el francés Romain Bardet (AG2R). Al respecto dijo: "Esto es ciclismo y es así". Valverde -que se sitúa 8º de la general a 51" del líder- insistió en que antes de llegar a las primeras etapas de alta montaña en los Alpes "hay que ir salvando los días".