Groenewegen, un sprint de 10

El holandés del Lotto NL-Jumbo se impone con suficiencia a Gaviria y Sagan en Chartres y consigue su 10ª victoria de la temporada. Greg Van Avermaet sigue líder.

Fernando Belda. Foto. Bettini Photo

Groenewegen, un sprint de 10
Groenewegen, un sprint de 10

Tenemos que intentarlo hoy”, afirmaba en la salida de la etapa Dylan Groenewegen, el potente sprinter holandés de 25 años que acumulaba 9 victorias esta temporada pero que no había podido plantar cara aún en este Tour a Gaviria y Sagan (su mejor puesto hasta hoy era un 4º, en Sarzeau). “Creo que tengo mejores piernas que otros días, puede que este sea nuestro día”, decía esta mañana.

Efectivamente, Groenewegen ha triunfado en la etapa más larga del Tour (231 km)  con una volata imperial en Chartres, de 10, como el número de victorias que alcanza en 2018. El final -en ligera pendiente ascendente los últimos 500 metros- le favorecía más que a Gaviria, el rey de los sprints en este Tour. Su equipo, LottoNL-Jumbo, lo sabía y trabajó toda la etapa para él. Por eso, tiraron con fuerza para echar abajo un corte peligroso que se formó al principio de la etapa, con ciclistas ilustres como De Gendt, Lampaert, Naesen, Gallopin, Gogl, Gerrans, Theuns… Mucho nivel como para dejarles marchar. Con esa acción Lotto-NL Jumbo mostraban plena confianza en su sprinter, para el que no dejaron de trabajar en ningún momento. 

Groenewegen superó con suficiencia en la volata a Fernando Gaviria, Peter Sagan (quien una vez más se “pegó” a la rueda del colombiano), Démare y Laporte. Quien se hundió de manera espectacular fue el noruego Alexander Kristoff –sin piernas en este Tour-, el primero en lanzar el sprint y que por momentos pareció disputar el triunfo a Groenewegen, Gaviria y Sagan para terminar hundiéndose fuera del Top-10. 

No hay cambios importantes en la general tras la 7ª etapa, Fougeres-Chartres, la más larga de este Tour con sus 231 km. Se mantienen todas las posiciones en el Top-20; la única novedad es que el líder, Greg Van Avermaet, amplía su ventaja en 3”, los que ganó tras pasar primero por el Punto bonificado de la etapa, a 31 km de meta.

El Tour de los modestos

Tras unos días frenéticos, hoy los ciclistas se lo tomaron con calma, hasta el punto de llegar con 20 minutos de retraso sobre el horario más lento previsto por la organización. Un día más, los ciclistas de los equipos invitados se dejaron ver para justificar su presencia en la carrera. Durante más de 100 km el protagonismo fue para el siempre combativo Yoann Ofredo (Wanty-Groupe Gobert), todo un especialista en fugas y clásicas que ya dejó su impronta en su primera Milán-San Remo, en 2010.

El francés saltó en el km 35 para hacer camino en solitario, bien acoplado en la bici, hasta alcanzar una ventaja de 9´10”, la máxima en este Tour. Su aventura concluyó a 90 km de meta. “Estamos aquí para escaparnos y animar la carrera. Lo más importante para nosotros es la publicidad para nuestros patrocinadores”, explicaba a France Television el director de Wanty, Hilaire van der Schueren. En ese sentido, objetivo cumplido para el equipo belga de categoría Continental Profesional. 

Tomó el relevo otro “modesto”,  Laurent Pichon (Fortuneo - Samsic), quien ya estuvo escapado en la jornada de ayer. Otros 50 kilómetros en fuga para satisfacer a sus patrocinadores. Es el Tour de los modestos. Fue cazado a 38 km de meta y ahí empezó una nueva carrera, llena de nervios, en las que los equipos de los sprinters no dieron opción a nadie. La llegada masiva estaba cantada, y en ella Dylan Groenewegen hizo un sprint de 10.

Mañana sábado  8ª etapa, Dreux-Amiens, de 181 km, que será la  última oportunidad para los hombres rápidos antes de que empiece la parte más intensa y decisiva del Tour (el domingo, llega la temida etapa del pavés, con final en Roubaix). De perfil llano, con sólo dos pequeñas cotas de 4ª en su parte inicial, se prevé una nueva llegada al sprint en las calles de una ciudad conocida por albergar la catedral gótica Notre-Dame de Amiens, la más grande de Francia.

CLASIFICACIÓN GENERAL