Mikel Landa apela a la heroica para seguir con su remontada con el objetivo de asaltar el podio de París. Si el pasado lunes, tras la caída camino de Albi que le hizo perder más de dos minutos, sus opciones de podio parecían remotas (cayó al puesto 21 de la general), dos buenas etapas en los Pirineos, mostrándose valiente y ofensivo, le han aupado a la 7ª plaza, a tan "sólo" 3 minutos del cajón. Con todo, lo mejores son las sensaciones que ha transmitido, las de ser uno de los mejores escaladores de este Tour de Francia al que aún le restan tres etapas decisivas en los Alpes (de jueves a sábado).
En el segundo día de descanso, Mikel Landa compareció antes los medios de comunicación, junto a sus campeñeros del Movistar Alejandro Valverde y Nairo Quintana, y ofreció sus impresiones sobre su situación en el Tour y como ve las etapas que aún restan: “El lunes pasado fue un golpe duro, pero había que seguir intentándolo. Los Pirineos nos dejan un balance positivo y de mucha ilusión y optimismo ante lo que viene. Creo que todavía tienen que pasar cosas en los Alpes. Ayer vimos por primera vez debilidad en Alaphilippe, y Pinot está muy fuerte, Thomas no está tan fuerte como parecía al principio… Yo creo que el Tour todavía no se ha decidido. A día de hoy pienso que Pinot es el más fuerte del Tour. Tuvo la pérdida del día de los abanicos y le toca remontar. Eso es bueno para mí y para el espectáculo.Ayer, me volví a sentir cómodo en esa situación; sentí el apoyo del equipo, que me ayudó mucho; y con ello he vuelto a recuperar esa alegría".
¿Podio o etapa?, le han preguntado a Mikel Landa en referencia a cuál es su gran objetivo para lo que queda de Tour: "Igual en este caso, en este Tour, me gustaría más subirme al podio. Llevo años intentando estar ahí. La primera vez que me subí a un podio de una ‘grande’… no es que fuera por suerte, pero sí más bien sin trabajarlo, sin aspirar a ello. Desde entonces llevo aspirando a ese podio, sobre todo aquí en el Tour, y me gustaría lograrlo".
Landa sabe que tras sus grandes actuaciones en las dos últimas etapas pirenaicas, los líderes de la carrera estarán más pendientes de él, lo que supone tener menos margen de maniobra: "Pienso que ahora sí me marcarán más estrechamente. Ayer, de hecho, cuando iba por delante ya hubo equipos que trabajaron por detrás. Esto es el Tour, se defiende cualquier puesto. No es mi caso, y quizás este Tour sea diferente para estas situaciones. Habrá también gente con ganas de dar la vuelta a su resultado. Estoy en una posición en la que no me puedo conformar. Tengo que hacer cosas como la de ayer para recuperar todo este tiempo -estoy incluso muy lejos del sexto puesto- en los tres días de Alpes que quedan".
