Como es habitual en la marca que lleva el nombre de 'El Caníbal', la denominación de su bici de gravel homenajea una de sus victorias. En concreto, cuando se impuso en la segunda etapa del Tour de Francia de 1971 a Roger de Vlaeminck en el velódromo de Estrasburgo, que en ese momento tenía una superficie de tierra.
La propuesta de gravel de Eddy Merckx nació en 2015 con un cuadro de aluminio, aunque en el catálogo de 2017 se introdujo esta versión de carbono que comparte bastidor con la bici de gran fondo Wallers73. Así, podemos colocar a la Strasbourg71 dentro de las bicicletas gravel con un carácter más pistero, que es donde exhibe sus mejores cualidades rodadoras gracias a los neumáticos Clément -ahora Donnelly- X'Plor de 35 mm, que en nuestras rutas nos han demostrado que prácticamente no lastran en asfalto y un agarre lateral decente por sus pequeños tacos.
Los tirantes finos y de sección plana y las vainas quebradas son los encargados de aportar comodidad en el triángulo trasero, ofreciendo una absorción más que aceptable teniendo en cuenta el ancho de los neumáticos.
La marca declara que puede albergar cubiertas de hasta 40 mm, aunque en la rueda trasera quizá quede poco espacio libre para el barro si utilizamos un modelo con mucho taco. A pesar de su carácter cercano al de una bici de carretera -también patente con su plato de 42 dientes-, la conducción es sencilla y se mueve bien en senderos con curvas rápidas por su escasa longitud entre ejes.
La marca belga sólo ofrece un montaje de la Strasbourg71 con SRAM Rival monoplato -ya no está disponible la versión de aluminio-, pero si buscas doble plato puedes optar por alguno de los modelos Wallers73. Si quieres soñar, visita la página de MyCorsa, donde tienes la posibilidad de diseñar tu cuadro gravel con una decoración personalizada y construido con tubos de acero Columbus Spirit HSS y Columbus Xcr.
