En campaña de financiación colectiva por Indiegogo el invento, del emprendedor Andre Jaramillo al que conocimos por su proyecto de talleres móviles Mybike, es un gadget sencillo pero de gran utilidad. Se llama Veloroof y consta de un sensor por ultrasonidos que se coloca sobre una de las barras del techo donde llevas la bici o incluso en el propio manillar de tu bicicleta y un módulo alarma que va dentro de tu coche, conectado por Bluetooth con el sensor. Cuando el sensor detecta un obstáculo hasta 20 metros por delante, en un ángulo de hasta 45º desde donde está ubicado, el módulo suena y se ilumina avisándote de que como sigas adelante te vas a quedar sin bici... o vas a provocarle una avería importante.
También se puede poner atrás para que no te cargues la bici cuando aparcas marcha atrás y hay algún obstáculo elevado que ni tu radar trasero del parachoques del coche ni tu vista alcanzan a detectar, si llevas la bici en el techo, y también cuando la llevas en un portabicis de bola detrás, que el sensor de tu coche no es efectivo. El sensor se instala en 30 segundos, con su sistema de quita y pon que facilita que lo cambies de coche, o lo cambies de ubicación.
Una puja de 53 € te permitirá hacerte con uno en condiciones ventajosas, si Veloroof alcanza la financiación necesaria para su producción, ya que su precio programado una vez esté a la venta por los canales normales es de 89 €.