Prueba: Casco Scott Cadence

Los 289 gramos de este Scott Cadence Plus, junto a la gran capacidad de ventilación, reducen la brecha entre cascos aero y convencionales al mínimo, acabando de paso con las pocas razones que nos pudieran quedar para elegir uno de este tipo.

Jose V. Gisbert / Sergio Palomar / Joaquín Calderón - Fotografía: wwww.cesarlloreda.com

Pruebas de material
Pruebas de material

Es sorprendente lo que han evolucionado los cascos aerodinámicos para carretera en los pocos años que llevan en el mercado. Sin dejar de atender a las ganancias frente al viento, poco a poco se han ido haciendo cada vez más ventilados y ligeros, no al nivel de los cascos tradicionales pero sí aproximándose tanto que incluso pueden resultar la opción única para ciclistas que habiten en zonas donde el calor no sea excesivamente riguroso. Claro ejemplo es este Cadence Plus que Scott incorpora a su gama.

Tratándose de un casco de corte aerodinámico llaman la atención desde el primer momento sus cinco amplias aperturas en la parte frontal y las aún mayores que se colocan en la parte trasera para evacuar el aire caliente. No podemos afirmar cómo se comportará en los calurosos días veraniegos, pero durante nuestro test, ya con frío invernal, echamos de menos haber llevado un gorro sotocasco como solemos hacer cuando utilizamos cascos abiertos. De todas formas, si el frío resulta un problema siempre podemos recurrir a las tapas para las aperturas frontales que se incluyen de serie, que además logran reducir aún más la resistencia al viento. Cuando las usemos el flujo de aire en el interior se reduce, pero aun así se mantiene un mínimo gracias a los dos pequeños orificios situados en la parte frontolateral que nos habían pasado casi desapercibidos.

Junto a su lograda ventilación, este Cadence Plus añade otros detalles interesantes, comenzando por la incorporación del sistema de protección ante impactos que hagan rotar la cabeza o MIPS. En esta ocasión destacan las múltiples perforaciones que se han efectuado sobre la lámina que contacta con nuestra cabeza, precisamente para no provocar un exceso de sudoración, bien resuelto aunque, tras probar el Bell que os mostrábamos en nuestro número 383 y que integra el MIPS en la estructura del sistema de retención, todo nos parece poco. Eso sí, cumple su cometido a la perfección y ya decimos, sin provocar la pequeña sensación de agobio de las primeras versiones.

Hablando del sistema de retención, mencionar que en este modelo Scott incorpora su nueva versión, denominada Halo, en la que se mejoran los puntos de contacto sobre la nuca para que resulten más cómodos y envolventes. Aparte, el ajuste en altura es más amplio y sencillo que en anteriores modelos. El resultado es un apriete uniforme por toda la cabeza que no provoca puntos de presión que se traduzcan en molestias con el paso de los kilómetros. En general, el casco resulta muy envolvente, con una fijación que hemos de calificar de sobresaliente. De hecho, simplemente apretando la ruleta trasera el casco se mantiene en su posición en la cabeza sin las correas, prueba de que la ergonomía resulta ideal. Aparte, las cintas son también rápidas de colocar gracias a la pieza plástica en forma de 'Y' que las divide.

A pesar de que sus competidores ya hace tiempo que contaban con buenos cascos aerodinámicos, la conclusión tras la prueba es que la espera ha merecido la pena y los 289 g de este Scott Cadence Plus, junto a la gran capacidad de ventilación, reducen la brecha entre cascos aero y convencionales al mínimo, acabando de paso con las pocas razones que nos pudieran quedar para elegir uno de este tipo. Aunque no seas de los que buscan arañar segundos al reloj, a nadie le amarga un dulce y, seamos sinceros, a todos nos gusta ir un poquito más deprisa cuando sale a relucir nuestra vena competitiva.

SCOTT CADENCE PLUS

Peso: 289 g (talla M), 20 g (tapas ventilación)

Precio: 228,90 €

Colores: Negro, blanco, verde, gris

Tallas: S (51 a 55 cm), M (55 a 59 cm) y L (59 a 61 cm)

Distribuidor: BM Sportech, 876 269 100

Página web de Scott