El dueño del maillot amarillo de líder, Tadej Pogacar, ha querido dar su punto de vista sobre la sorprendente dureza y exigencia que se le imprimió al recorrido de la última jornada de la Grande Boucle: "Esperábamos que la etapa de hoy fuera así. El calor la hizo más difícil, y tener a Mathieu Van der Poel en la escapada tampoco ayudó. Ha resultado súper dura para ser una etapa llana". Las temperaturas altas se mezclarán con el ambiente festivo del 14 de julio y el campeón del mundo sabe de la importancia y de lo que genera ese día en el pelotón y el público: "Mañana esperamos una etapa muy calurosa y dura. Habrá una gran lucha por la escapada, ya que es la fiesta nacional francesa y todos los corredores franceses querrán dar un gran espectáculo. Será difícil de controlar, pero estaremos delante y muy atentos a los movimientos de los demás equipos. No es el recorrido más duro, pero ofrece muchas posibilidades; también pensando en la general".
Desgraciadamente, Joao Almeida (UAE Emirates - XRG) se ha visto obligado a abandonar el Tour de Francia y Pogacar sabe de la valía y el talento de su compañero: "Había sido increíble cómo Joao [Almeida] había lidiado con las consecuencias de su caída durante los dos últimos días. Si yo he sufrido durante toda la etapa de hoy, no me puedo imaginar lo que habrá sufrido él. Siento un gran respeto por él y me entristece mucho que tenga que abandonar. Tenerlo metido en la lucha de la general era un lujo para nosotros. Ahora nos toca replantear nuestra estrategia para que su ausencia nos afecte lo menos posible. Estaba en plena forma y tengo muchas ganas de que se recupere y vuelva a competir. Y, por supuesto, ahora quiero ganar este Tour de Francia también por Joao".
🎙 🇸🇮@TamauPogi : «C’était un luxe d’avoir @JooAlmeida98 dans la bataille pour le Maillot Jaune. Il aurait pu faire de belles choses à titre personnel ici et bien sûr il aurait été d’une grande aide en montagne, tant moralement que physiquement.
— Maillot Jaune LCL (@MaillotjauneLCL) July 13, 2025
Maintenant nous allons nous… pic.twitter.com/en0iO5gvio
En el lado de la victoria parcial, aparece Tim Merlier (Soudal - Quick Step), quién enaltece el trabajo de su equipo tras ganar su segunda etapa: “El ritmo en el pelotón era soportable hasta los intentos de abanico de la parte final. No pude beber nada en los últimos 60 kilómetros, así que estaba un poco asado. Aparte de eso, ha sido un buen día, aunque bastante nervioso. La ventaja de 5’30” que tenía la fuga era demasiado grande, y el ritmo de caza fue bastante alto. Contribuimos a la persecución; incluso Remco [Evenepoel] lo hizo. Normalmente, soy yo quien le ayuda; pero, en situaciones así, él va sin cadena y puede hacer camino fácilmente. Intentamos protegernos mutuamente todo lo posible en los abanicos, pero creo que hoy me ha ayudado más a mí que yo a él. Remco estaba muy triste ayer después de que un pinchazo me impidiera disputar la llegada. Hay un gran ambiente en nuestro equipo, y eso se nota para bien en la carretera”
Las batallas de sprinters en los metros finales son milimétricas en muchas ocasiones y Merlier conoce la dificultad y se vale la velocidad de sus contricantes para mentalizarse y mejorar para batirlos: “En los dos últimos kilómetros, me he podido encontrar con mi lanzador Bert [Van Lerberghe]; me da mucha confianza estar a su rueda, porque nos conocemos y sé lo que va a hacer. Me he quedado un poco encerrado de cara al sprint, pero luego he conseguido hacerme hueco y lanzarme tal y como quería. Estoy contento de ganar mi segunda etapa de este Tour precisamente en Châteauroux.Es la segunda vez que consigo batir a [Jonathan] Milan, que es un rival muy duro. Me encanta batallar con él".
