Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) está un día más cerca de conquistar su cuarto Tour de Francia tras solventar con nota una de las citas más complicadas de la última semana, el Mont Ventoux, subida en la que Vingegaard le puso en apuros (le llegó a soltar) en 2021.
"Jonas [Vingegaard] lo ha intentado con todo hoy. Ellos [Visma] han corrido bastante bien como equipo, pero por suerte yo tenía mejores piernas que en 2021 y he podido hacer frente a sus ataques. Estoy contento con mi actuación, ya que he podido defender el maillot amarillo como habíamos planeado por la mañana. En algunos puntos he sufrido, pero hoy sólo ha sido una subida; un único esfuerzo a tope del pie hasta la cima del puerto. Los próximos días tendrán varias subidas y serán más exigentes", comentaba el esloveno del UAE en la meta del Gigante de la Provenza.
Pogacar, que lidera la clasificación general con 4´15" de ventaja sobre Vingegaard, hizo el siguiente análisis de la etapa. "Dejamos que Pavel [Sivakov] y Marc [Soler] se fueran en la escapada porque no nos interesaba demasiado la victoria de etapa y, si teníamos que trabajar en el puerto final, contábamos con Tim [Wellens] y Adam [Yates], además de la posibilidad de pedirles a los fugados que pararan. No obstante, Visma fue muy agresivo y casi alcanzamos a la escapada. Vimos a los ganadores a falta de un kilómetro, pero ni Superman hubiera podido alcanzarlos. Chapeau a Valentin Paret Peintre; se merecía la victoria, en estas subidas largas es donde más brilla. Mi foco hoy estaba puesto en Jonas, y nada más. Jonas y yo vamos a competir [por el maillot amarillo] hasta París. Ésta ha sido una etapa muy dura, sobre todo después de un día de descanso, y estoy contento de haberla superado".
El campeón del mundo aseguró que los ataques de su principal rival, el danés Jonas Vingegaard, no le perturbaron: "Ha atacado varias veces, pero sentía que podía seguir su rueda sin forzar demasiado. Era mejor no atacar porque nos arriesgábamos a su contraataque, era mejor ser prudente. He atacado una vez, pero he pensado que era mejor mantener el ritmo, controlar la carrera", comentó.
El esloveno restó importancia a no haber conseguido la victoria de etapa: "Era difícil controlar en el llano con un solo corredor. La fuga ha ido muy rápida y nosotros no queríamos desperdiciar demasiada energía. El equipo ha trabajado mucho para controlar la carrera, trataré de darle otra victoria en Alpes", afirmó.
"No creo que hoy hubiéramos podido rodar mucho más rápido de lo que lo hemos hecho. Jonas y su equipo han marcado un ritmo muy bueno desde la base del puerto, y también más adelante con los dos hombres que venían de la fuga. Este es el límite de lo rápido que podíamos rodar”, concluía el maillot amarillo del Tour de Francia.